Estudio Presenta Nuevas Medidas para Mejorar los Rendimientos Agrícolas y la Protección de la Biodiv
La comunidad internacional ha tomado diferentes medidas para abordar el problema de la disminución de la población de las abejas. A través de acuerdos como el Convenio sobre la Diversidad Biológica, diferentes naciones se han comprometido a asumir la responsabilidad de mejorar las condiciones para el medio ambiente y las condiciones para las abejas. Ahora, un grupo de científicos del Centro Internacional de Investigación Agrícola en Zonas Áridas dará a conocer un nuevo plan para mejorar dramáticamente las condiciones para los polinizadores. La jefa de la investigación, la Dra. Stefanie Christmann, presentará los resultados del estudio en la conferencia sobre biodiversidad de la ONU. Uno de los hallazgos clave es que, al sembrar cultivos económicos florecientes, puede haber un impacto significativo que beneficie tanto a los ingresos de los agricultores como a la biodiversidad. Tales cultivos incluyen especias, semillas oleaginosas, plantas medicinales y forrajeras. El estudio llega como un nuevo recordatorio de que existen alternativas. La agricultura no necesita estar totalmente dedicada a las prácticas agroquímicas que son perjudiciales para el medio ambiente. A través de la aplicación de nuevas lógicas agrícolas eco-responsables, como el manejo integrado de plagas y las estrategias presentadas por el ICAR, podemos encontrar un cambio beneficioso en el medio ambiente y la agricultura. La evidencia muestra que el uso insostenible de pesticidas está diezmando la población de insectos y aves. La situación puede variar de una región a otra y de un país a otro, pero la necesidad de mejorar sigue siendo a escala mundial. En la UE, tres sustancias neonicotinoides han sido prohibidas a principios de 2018, pero tales prohibiciones aún no son suficientes. Aunque son un paso importante, muestran que los desafíos aún están presentes. Además, algunos países continúan evitando estas prohibiciones sin ninguna justificación adecuada. Por lo tanto, las prohibiciones no son el principal cambio necesario para mejorar las condiciones en el medio ambiente, favorecer la biodiversidad integralmente y prevenir una continuación de una crisis de las abejas. Medidas como la propuesta por el ICAR apuntan hacia un nuevo razonamiento en la agricultura, basada en la sostenibilidad y la viabilidad en la mayoría de las condiciones. Para los agricultores, su inversión en este tipo de estrategias se limita a semillas asequibles. Además de las semillas, solo necesitan el conocimiento para aplicar esto a sus cultivos, que es lo suficientemente simple como para que los expertos puedan "demostrar cómo hacerlo con imágenes enviadas en un teléfono celular", según ha mencionado la Dra. Christmann al diario The Guardian. A diferencia del uso de franjas florales, que la UE promueve actualmente, esta nueva estrategia apunta a una medida tanto de mejorar la protección de la biodiversidad como de aumentar los ingresos para los agricultores. El estudio ha revelado que, al incluir cultivos económicos florecientes en una de cada cuatro franjas, las ganancias en los rendimientos pueden variar desde 50% hasta 561% más, dependiendo según la región y el producto. Hay dos lecciones principales para retener de este estudio. Primero, existen nuevas prácticas que son eco-responsables y que benefician enormemente a la alianza entre la naturaleza y el agricultor. Segundo, se necesita apoyo y confianza para encontrar tales alternativas. Mejorar las condiciones para la biodiversidad depende de buscarlas y tener la voluntad de aplicarlas. La voluntad de tener mejores condiciones para el medio ambiente y proteger a los polinizadores y la biodiversidad debe expandirse a los agricultores, apicultores, administradores, investigadores, responsables políticos y líderes.